La Brixton Crossfire 500 XC es la versión “scrambler” de su hermana de carretera Crossfire 500.
Las motocicletas trail son actualmente un segmento en alza, pero hay motoristas que prefieren un modelo de carretera con ciertos toques off-road.
Es en este segmento donde las “scrambler” van cogiendo cada vez más protagonismo.
Y la Brixton Crossfire 500 XC es una de las mejor preparadas y equipadas para desempeñar esta faceta.
Brixton, marca perteneciente al grupo austriaco KSR, ha hecho un modelo realmente único y atractivo.
Estética
Especialmente sugerente nos ha parecido su estética que enfatiza su aspecto campero, sin decoraciones estridentes, pero con un diseño contundente.
La marca ha hecho especial hincapié en enfatizar el carácter offroad de la Crossfire 500 XC.
La encontramos disponible en un solo color, el Desert Gold Matt, un color arena que potencia su aspecto aventurero.
Encontramos buenos detalles para las salidas por pistas de tierra como guardabarros delantero alto, manillar alto, protector de faro, protector de radiador y motor, protectores laterales, escape de aluminio de salida alta, gomas en el depósito para controlarla bien de pie, suspensiones de mayor recorrido, neumáticos mixtos y llanta de 19” delante y 17” detrás.
Todo ello en aras de conseguir una imagen de aventurera deportiva, aumentada por los números de estilo competición en sus placas laterales.
La posición de conducción es cómoda gracias al manillar que elevan las torretas, un buen asiento plano y la forma del depósito que permite abrazarlo bien con nuestras piernas para mantener el control.
Los mandos son de accionamiento suave y su cambio de 6 marchas es toda una delicia.
Motor
Su motor es un bicilíndrico en línea de 4 tiempos, refrigerado por líquido y alimentado por inyección electrónica que ofrece una potencia de 47,6 CV a 8.500 rpm y un par de 43 Nm / 6750 rpm.
Es un motor de comportamiento muy noble, que trabaja muy bien en medios y bajos y que se estira hasta los 160 km/h.
Instrumentación
El cuadro de instrumentos está formado por una esfera LCD negativa con velocímetro, tacómetro, marcha engranada, nivel de combustible, reloj horario y testigos luminosos de largas, intermitentes, carga batería, ABS, aceite y temperatura refrigerante.
En cuanto a la iluminación es “full led”, destacando la luz diurna y una visión muy buena en conducción nocturna.
Componentes
Brixton no ha escatimado recursos en la Crossfire 500 XC, con componentes de gran calidad, difíciles de ver en su segmento.
Las suspensiones están firmadas por Kayaba, con una horquilla invertida delantera de 150 mm de recorrido, ajustable en compresión.
En su parte trasera encontramos un amortiguador Kayaba de 130 mm de recorrido, regulable en extensión y precarga.
El equipo de frenos es del prestigioso fabricante español J. Juan, con un disco delantero de 320 mm con pinza radial de 4 pistones y detrás un disco de 240 mm con pinza de dos pistones.
Ambos trenes están asistidos por la versión 9.1 ABS-Bosch de dos canales que otorga la seguridad necesaria en cualquier momento, aunque no es desconectable para circulación offroad.
Para mejorar la conducción offroad, la llanta delantera es de 19”, mientras que en su parte trasera monta una llanta de 17”.
Las llantas ofrecen un detalle exclusivo con la cabeza de los radios montada fuera del neumático, un “gadget” digno de agradecer.
Monta unos neumáticos mixtos Pirelli Scorpion Rally STR con medidas 110/80-19” delante y 150/60-17”.
Conducción
En cuanto la ponemos en marcha el bicilíndrico ruge con ganas y empuja con fuerza, y la agilidad que nos ofrece su manillar alto invita a dar gas.
La Brixton Crossfire 500 XC se mueve con soltura, y con su aplomo al asfalto parece que estemos pilotando una moto de mayor cilindrada.
Gran nota en la frenada que se muestra precisa en todo momento, al igual que el funcionamiento de las suspensiones.
Al tener una geometría distinta a la de una moto de carretera, en carreteras serpenteadas podemos exprimirla al máximo.
Los neumáticos disponen de buen agarre y la mayor altura al suelo logra que podamos realizar unas buenas inclinadas.
Si la carretera es bacheada y con poco agarre, pocas motos podrán competir con ella.
Aunque no es una trail, la Brixton Crossfire 500 XC si que permite salir del negro asfalto y por pistas de tierra en buen estado se puede ir a buen ritmo. Con un excelente trabajo por parte de sus neumáticos y suspensiones.
La Brixton Crossfire 500 XC se ha mostrado como una moto muy polivalente, perfecta para cualquier tipo de uso y con una estética muy lograda.
Motor: 4 tiempos, bicilíndrico en línea
Cilindrada: 486 cc
Alimentación: inyección electrónica
Refrigeración: líquida
Potencia: 47.6 CV a 8.500 rpm
Par motor máximo: 43 Nm a 6.750 rpm
Caja de cambio: 6 velocidades
Freno delantero: disco de 320 mm, pinza radial de 4 pistones, ABS doble canal
Freno trasero: disco de 240 mm, pinza de 1 pistón, ABS doble canal
Suspensión delantera: horquilla invertida Kayaba de 150 mm de recorrido
Suspensión trasera: amortiguador Kayaba de 130 mm recorrido
Neumático delantero: 110/80-19”
Neumático trasero: 150/60-17”
Peso en orden de marcha: 195 kg.
Altura asiento: 839 mm
LargoxAnchoxAlto: 2.164x851x1.203 mm
Consumo: 4 l/100 km
Velocidad máxima: 160 km/h
Precio: 7.699 euros