Un equipo de ingenieros de Nerva puso a prueba el maxi scooter eléctrico EXE en un exigente viaje hasta La Leyenda Continúa.
Un equipo de ingenieros de la marca ha protagonizado una emocionante expedición a La Leyenda Continúa.
Celebrada en la localidad segoviana de Cantalejo el pasado mes de enero, poniendo a prueba el maxi scooter 100% eléctrico: Nerva EXE.
Una ruta de en torno a 140 kilómetros, con desniveles importantes que el maxi scooter salvó sin ningún tipo de dificultad.
Efectuando una sola parada para cargar la batería y haciendo valía tanto de su intachable comportamiento dinámico, como del rendimiento del conjunto propulsor (motor, electrónica de potencia y baterías) en condiciones de frío, uno de los aspectos que más preocupan a los usuarios, y que sin embargo se pasó con nota, pues no afectó al rango del EXE.
Técnica
La duración de sus baterías ha quedado más que probada, y es que el equipo sólo tuvo que realizar una parada a mitad de trayecto, habiendo superado previamente el puerto de montaña, para cargar los vehículos.
El hecho de que cada vez sean más los lugares preparados para la carga de eléctrico y el que el EXE venga equipado también con un cargador con conector Schuko-Tipo 2 (el típico de la red eléctrica doméstica), hace que sea muy sencillo cargarlo en cualquier lugar.
Y es que, en algo más de 3 horas alcanza el 80% de carga, suficiente para aprovechar para comer y descansar y continuar el camino.
La potencia del Nerva EXE también fue clave a la hora de superar este reto, así como una gestión inteligente de la misma.
Jugando con los diferentes modos de conducción, los miembros del equipo pudieron hacer frente a los tramos de autopista, alcanzando sin problemas los 120 km/h con el modo SPORT, así como las zonas más reviradas, en las que pudieron reducir utilizando el modo NORMAL.
De hecho, para maximizar el rendimiento de la batería, también se acogieron al ECO y aprovecharon el freno regenerativo en las zonas de bajada, recuperando incluso una parte de la carga.
Los ingenieros también aprovecharon el tramo para instalar sistemas de adquisición de datos en las motos, con el fin de recoger información valiosa del rendimiento de los distintos sistemas.