Royal Alloy se actualiza en 2022 para el mercado español adaptando sus dos modelos GP y TG ambos en las cilindradas de 125 y 300 a la homologación Euro 5.
Con su origen británico, Royal Alloy capta a la perfección la cultura Mod que fue tan popular en los sesenta y cuya llama sigue todavía viva. Los scooters de Royal Alloy no son unos simples modelos retro o “vintage”. Su concepto es muy diferente: ser fiel a la filosofía clásica pero adaptándose a los tiempos actuales con tecnología y materiales reales. Su lema “Real Classic” transmite esa pasión por la tradición de los scooters reales, verdaderos y auténticos.
Royal Alloy surge de la iniciativa de unos aficionados británicos que quisieron seguir transmitiendo esa cultura Mod (abreviatura de modernismo) que surgió en Londres a finales de los ’50 y que alcanzó su máximo esplendor en la década de los ’60. La excentricidad de los jóvenes Mod estaba asociada con un estilo de vida muy bien definido. Los gustos musicales se decantaban por el Jazz moderno, el Soul, R&B o el Ska jamaicano. La ropa era ajustada con botines y parkas “cola de pez” para los chicos, y minifaldas y jerseys de cuello de cisne para las chicas. En cuanto al medio de transporte, coincidencia total en emplear scooters de origen italiano personalizados con multitud de espejos retrovisores y faros auxiliares como bien recoge la ópera rock Quadrophenia del grupo británico The Who convertida a película en 1979.
Seis décadas después, la moda del Mod sigue viva. Desde Londres se extendió a Gran Bretaña y, pronto, en todo el mundo se conoció y caló muy hondo esa cultura. Sin embargo, aquellos antiguos scooters italianos requerían un gran esfuerzo en su restauración y costaba entender esa filosofía a los mandos de un modelo retro. Los fundadores de Royal Alloy entendieron que el mercado requería un scooter clásico real y no “vintage”. No sólo su estética se inspira en la de aquellos scooters italianos de los ’60, sino que también huye de la masificación del plástico empleando materiales como la chapa estampada de acero inoxidable para los cófanos laterales desmontables y el escudo frontal o la fundición de aluminio para el faro, minimizando el uso del plástico a la “corbata” del escudo, guardabarros delantero o la tradicional y amplia guantera con cerradura.
La tradición también está presente en la suspensión delantera que emplea un sistema de doble brazo por bieletas oscilantes con sendos amortiguadores, eso sí, hidráulicos, con doble paso de muelle y ajustables en precarga de muelle, además de un mecanismo anti-hundimiento que aprovecha la reacción del freno de disco para evitar que se comprima la suspensión al frenar. Todo ello convierte a esta suspensión en la más sofisticada del mercado a pesar de su aspecto tan tradicional.
Ese contraste tradición-tecnología está muy presente en otros detalles de la familia Royal Alloy. El motor, por ejemplo, recurre al ciclo 4T con la refrigeración líquida e inyección electrónica con cambio automático por variador, y su desarrollo ha sido realizado por conocidas marcas europeas lo que garantiza la mejor fiabilidad del vehículo.
En cuanto a frenos, la gama de scooters Royal Alloy emplea frenos de disco “Wave” en 220 mm de diámetro sobre llantas de 12 pulgadas, añadiendo la seguridad de un sistema antibloqueo de doble canal confiado al especialista alemán Bosch para la versión de 300 cc.
Hay más tecnología como la del alumbrado Full LED que está presente en el faro para los modelos TG, así como en los intermitentes y piloto trasero para todos los modelos. Así mismo se dispone para los modelos de GP 125/300 y TG 125 de un completo cuadro de instrumentos basado en una pantalla LCD retroiluminada dentro de un marco clásico cromado con mucha información: velocímetro, cuentavueltas, niveles de gasolina y temperatura del refrigerante y cuentakilómetros total y parcial, además de una colección de testigos luminosos. En cambio, el modelo TG 300 S recurre a una pantalla táctil TFT a color de mayor superficie con mucha más información.
Toda esa atención al detalle en cuanto a materiales, estética y tecnología se complementa con la verdadera esencia del scooter presente también en los modelos de Royal Alloy: la versatilidad, limpieza, confort, agilidad, y facilidad de conducción en el uso diario para los desplazamientos urbanos.
Y para hacer todavía más exclusiva cada Royal Alloy, su usuario dispone de una amplia gama de accesorios originales para convertir su GP o TG en un scooter único a tu gusto personal.
Royal Alloy GP 125
La versión dirigida a los usuarios de la convalidación (con carnet de coche) no defraudará a los que no sólo buscan un scooter clásico de verdad sino a los que también prefieren hacerse notar en sus recorridos diarios por ciudad impulsados por un sencillo y robusto motor de 2 válvulas homologado para la Euro 5, con inyección electrónica Delphi y refrigeración por aire forzado que, con sus casi 10 CV de potencia, proporciona unas brillantes prestaciones para destacarse del resto del tráfico a la salida de cualquier semáforo, manteniendo en todo momento unas bajas emisiones (89 gr/km de CO2) y un consumo muy contenido.
En su manillar de fundición de aluminio se integra para esta edición 2022 un faro Full LED cuya tecnología se hace extensible a los intermitentes y piloto trasero. Ese contraste clásico-moderno también está presente en el panel de instrumentos para el que se utiliza a una pantalla LCD.
El GP 125 emplea una dotación de frenos de disco con funcionamiento combinado CBS y está ya disponible en la red de puntos de venta de España de Royal Alloy en color blanco o gris a un precio de 3.389€ (IVA incluido).
Royal Alloy TG 125
Se trata de una importante novedad en la gama 2022 de Royal Alloy, ya que se adapta el bastidor TG de mayor envergadura, que ya estrenó el modelo de 300, a la cilindrada de la convalidación.
Para el motor se emplea el mismo grupo propulsor de la GP 125 caracterizado por su sencillez mecánica (2 válvulas y refrigeración por aire forzado) y una entrega de potencia de 10 CV muy dosificable desde el acelerador.
El nuevo bastidor TG con carrocería de chapa de acero inoxidable estampada se ofrece en dos diferente tonos bicolor como se llevaba en las décadas de los sesenta y setenta: la parte central del cuerpo posterior junto con el escudo frontal y guardabarros delantero se muestra en blanco marfil y los cófanos laterales así como la “nariz” del escudo en gris, rojo o azul.
El asiento es otra de las características que identifican a la serie TG adoptando uno con la zona que acomoda al piloto rebajada en altura y un delgado espesor tipo “Slim” con mullido de gel que no afecta al confort y que facilitará a las tallas menos altas a llegar con facilidad al suelo.
Como en la 300, todo el sistema de alumbrado es Full LED disponiendo para el faro de un doble módulo de alta intensidad, mientras que para el piloto trasero y los cuatro intermitentes se adoptan matrices de diodos, con las dos unidades traseras de diminuto tamaño y sobresaliendo de la superficie de los cófanos laterales.
El precio del nuevo TG 125 es de 3.789 € (IVA incluido) y está disponible en colores bitono blanco/gris, blanco/granate y blanco/azul eléctrico
Royal Alloy GP 300 S
Otra novedad en la familia de scooters clásicos reales de Royal Alloy es el modelo de 300 cc que se presenta con la carrocería Grand Prix como alternativa económica al ya conocido aunque evolucionado TG 300 S. Y no por ello, el GP 300 S está peor dotado. De hecho, el motor empleado para impulsarlo es también un Piaggio refrigerado por agua con culata de 4 válvulas e inyección electrónica Magneti Marelli que desarrolla una potencia máxima de 25,1 CV a 8.250 rpm, y que es capaz de registrar altas velocidades de crucero en carretera abierta con su contenido peso de 152 kg, que le proporciona una gran agilidad para moverse incluso en las ciudades más congestionadas.
Al igual que en la versión de 125 cc, la serie GP ha sido revisada con pequeños ajustes en la edición ’22 destacando la articulación del bloque motor-transmisión y en la pinza delantera cuyo accionamiento sirve para conseguir un efecto antihundimiento en el sistema de bieletas oscilantes del tren delantero..
El GP 300 S se completa con un panel de instrumentos compuesto por una pantalla LCD con sobrada información y de fácil lectura para consultar de un vistazo sin desatender la atención a la carretera.
El GP 300 S se ofrece en colores blanco y gris a un precio de 5.089 €.
Royal Alloy TG 300 S
Nos encontramos ante el buque insignia de Royal Alloy en el que se combina la máxima atención al detalle, un equipamiento de máximo nivel y la mecánica de 300 cc con 4 válvulas, refrigeración líquida e inyección Magneti Marelli, proporcionada por Piaggio: todo una garantía de robustez, calidad y rendimiento para emplear el TG 300 S tanto en los desplazamientos por ciudad de diario como por carretera abierta.
En la serie Tigara Grande (Punto Grande) los materiales “reales” empleados (caso de la carrocería en chapa estampada de acero inoxidable sobre bastidor multitubular con el manillar de aluminio) se extienden a la fundición de aluminio para la nariz del escudo frontal y el portabultos, elevando el nivel tecnológico con un panel de instrumentos basado en una pantalla TFT a todo color con la peculiaridad de ser táctil para todas las funciones de ajuste, además del alumbrado Full LED desde el faro al piloto, pasando por los intermitentes.
El Royal Alloy TG 300S está disponible en colores bitono blanco/gris, blanco/granate y blanco/azul eléctrico al precio de 5.489 €.
Toda la información en la WEB oficial: