Triumph participará desde la próxima temporada 2021 en el Campeonato Británico de Velocidad con un equipo de fábrica a través del Performance Technical Racing.
Triumph llega al BSB en un momento en el que la categoría de Supersport busca adaptarse a la evolución de dicho segmento en el mercado, para así ofrecer el mejor de los espectáculos en competición con las motos actuales derivadas de serie, como ya ha ocurrido en la categoría de Supersport 300. El nuevo reglamento técnico aprobado por los distintos organizadores del Campeonato Británico de Velocidad (FIM, Dorna WorldSBK y Motor Sports Vision Racing) para la categoría de Supersport, abre así la puerta a la vuelta oficial de Triumph al paddock del BSB.
Una noticia que ha sido más que bienvenida por todos los apasionados de las dos ruedas en general y de la marca de Hinckley en particular. El jefe de producto de la marca británica, Steve Sargent, ha recordado exitosa la trayectoria de Triumph en el mundo de la más alta competición y ha agradecido el trabajo de la organización: “estamos muy contentos de que MSVR, Dorna y la FIM estén trabajando para sacar adelante la categoría de Supersport y alentar a fabricantes como Triumph a regresar a la competición”.
Desde el propio equipo PTR y desde Triumph, confían en los buenos resultados que pueden alcanzar juntos en 2021 para evolucionar y actualizar el reglamento del BSB y el WSS. Las propias declaraciones de Simon Buckmaster – Team Manager del equipo PTR demuestran la ilusión con la que afrontan el proyecto: “Estamos deseando empezar y ya estamos trabajando junto con Triumph para preparar la Street Triple RS 765 de cara al inicio de la temporada 2021, desarrollarla durante las carreras y definir los estándares para ambas series y otras que puedan llegar de todo el mundo en el futuro”.
Buckmaster, que ha confesado que empezó a correr con una Triumph Bonneville, también ha confirmado que actualmente están en conversaciones con varios pilotos y esperan lograr su objetivo de ganar el Supersport británico el primer año y luchar por el título mundial en el World Supersport al año siguiente.
De hecho, el objetivo del proyecto no es solo hacer realidad el regreso de una marca británica legendaria al paddock de uno de los campeonatos nacionales de motociclismo más relevantes del panorama actual. La introducción de la Street Triple RS de 765cc de Triumph en una estructura oficial del BSB será una prueba piloto con la que se busca alcanzar resultados inmediatos y desarrollar el equipo y la máquina de cara a competir en el Campeonato del Mundo de Supersport a partir de 2022.
Tal y como ha afirmado Stuart Higgs – Director del BSB: “Este desarrollo, que se llevará a cabo como proyecto piloto en el Reino Unido en 2021 y que esperamos que sea adoptado a nivel internacional, abrirá inmediatamente la posibilidad de que los fabricantes regresen a la competición”. Para él es crucial que Triumph, con un éxito probado en la categoría intermedia derivada de producción, regrese ahora: “estamos entusiasmados ante la perspectiva de que esto ocurra en los circuitos británicos en 2021”.