El editor Bengt Björklund de la revista sueca ‘Motor Cycle News’ tuvo la idea de que Husqvarna volviera a la competición después de la 2ª Guerra Mundial.
La nueva Husqvarna de competición se basaría en el motor de 250 cc de la marca, que no era el más rápido del panorama internacional, pero gozaba de una excelente fiabilidad y una amplia gama de revoluciones.
Se decidió que el proyecto sería una empresa conjunta entre Husqvarna, donde Bror Jaurén era responsable, y MC-Nytt, donde Bengt Björklund sería la fuerza impulsora. Las partes del motor y algunos otros componentes fueron entregados a las personas de la revista que luego se encargaron de realizar una motocicleta de carreras.
Un chasis de la moto de cross de Husqvarna se usaba por primera vez para una motocicleta de carreras, demostrando que fue una idea plenamente acertada. El ingeniero de desarrollo Tommy Malm eayudó con los ajustes y también hizo algunas modificaciones en el motor para conseguir que la moto fuese más rápida. Al equipo se le permitió usar las instalaciones de Husqvarna, pero tuvo que trabajar en su tiempo libre, fuera del horario laboral.
Uno de los pilotos escogido fue Anders Bengtsson, que tenía poca experiencia en las carreras, pero se lo consideraba un temerario de las dos ruedas. A finales de 1965, el corredor Kent Andersson también fue contactado lo que le dio a Husqvarna un excelente par de pilotos para la nueva temporada TT.
La carrera inicial del campeonato nacional se iba a celebrar en Skarpnäck, en las afueras de la capital sueca, Estocolmo. Tommy Malm había pasado muchas horas en el taller preparando la Husqvarna. La carrera fue muy bien y Kent Andersson (campeón mundial de 125cc para una marca japonesa muchos años después) ganó la clase de 250cc mientras que Bengtsson logró terminar tercero.
Este éxito le dio mucha confianza a la fábrica y a los miembros del equipo, y Husqvarna continuó con las carreras de TT en el continente europeo. En los circuitos más revirados Andersson y Bengtsson tenían ventaja pues sus Husqvarna de 250 cc ofrecían un buen rendimiento en combinación con un agarre superior en carretera.
En cambio en las pistas más rápidas no tuvieron tanto éxito ya que su velocidad máxima nunca pudo igualar a la de sus competidores.
Gracias a todos estos éxitos Husqvarna se decidió a participar en el Campeonato Mundial. El debut en el Gran Premio de Husqvarna no podría haber sido mejor para un equipo novato. Kent Andersson se convirtió en el primer piloto sueco en terminar en los puntos cuando cruzó la línea de meta en sexto lugar, dando a la fábrica su primer punto en el campeonato mundial.
Sin embargo Husqvarna pensó que no valía la pena seguir en el Mundial, ya que el esfuerzo económico que suponía recortaría demasiados recursos a la fabricación de motocicletas y en 1967 retiraron el equipo del Circus Mundial.